martes, 25 de mayo de 2010

CALPURNIA Y DARWIN

La autora del libro, Jacqueline Kelly. Créditos

En 1899 ya habíamos aprendido a dominar la oscuridad, pero no el calor de Texas. Nos levantábamos de noche, horas antes del amanecer, cuando apenas había una mancha añil en el cielo oriental y el resto del horizonte seguía negro como el carbón.
Encendíamos nuestras lámparas de queroseno y salíamos con ellas por delante, como si fueran nuestros propios solecitos titilantes. Nos esperaba mucho trabajo antes del mediodía, cuando el mortal calor nos devolvía a todos al interior de nuestra gran casa y nos tumbábamos en los cuartos sombríos de postigos cerrados y techos altos, como víctimas sudorosas.

De esta forma comienza la novela La evolución de Calpurnia Tate (Roca editorial) de la escritora estadounidense, nacida en Nueva Zelanda, Jacqueline Kelly.

La protagonista es Calpurnia Virginia Tate, una niña de 11 años que un caluroso verano de 1899 en Texas empieza a hacerse preguntas sobre su entorno y, con la ayuda de su abuelo, se convierte en naturalista. Cada capítulo se inicia con unas frases del famoso libro El origen de las especies de Darwin, por lo que el padre de la teoría de la evolución es casi un personaje de esta novela.

En una sociedad machista en la que la mujer tiene marcado su destino (el matrimonio, la cocina y la costura), nuestra pequeña heroína descubre otra forma de relacionarse con el mundo.

Sin embargo la mejor forma de conocer esta novela, concebida originariamente para un público juvenil, es leer los primeros capítulos y acercarnos a la autora en esta entrevista.


Otros materiales:
  1. Reseña de la novela
  2. Análisis y propuestas de trabajo
  3. Otro análisis de algunos aspectos